El doce de mayo de dos mil
ocho,
bese su mano, sentí su frío,
no quiso hacerlo
me dio otro
plazo.......azpeitia
He visto las alas de la
muerte....
.....hoy me han rozado.
Silencios de su vuelo
impenitente,
susurro de su viento en mi
costado.
Me curvo sobre mí para
esquivarla,
no quiero ver su cara sin
facciones...
que pase sin mirarme
fijamente.
Beso su mano negra,
huesuda, descarnada,
amaga el torpe gesto
de un golpe de guadaña,
y un dolor visceral
desconocido
hunde su daga profunda
hasta mi entraña.
Me ha llenado de sangre....
....¡era la mía!...
Caliente aún en mi mano
enrojecida,
pregunta si este aviso
es suficiente.
Se aleja con desdén, con
alegría,
sin ceremonias solemnes,
sin adioses,
un guiño de su sombra...
entre dos luces...
Un gesto milenario ya
estudiado.
Mañana volverás....
mas no sé cómo,
me angustia que no quiera
desvelarlo,
señal de un calendario
caprichoso,
hundido en el destino
que es... ¡la suerte!
Hoy creo comprenderlo...
más que nunca...
La vida es un milagro...
....sin la muerte.
AZPEITIA
2 comentarios:
Una oda para lo inevitable, dicha en forma que cautiva, que lleva hasta el final reflexionando, preguntándose cómo será ese final...
Un abrazo de Azpeitia
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