Porque todos
somos iguales
aunque diferentes
y tú lo sabes.
Has llegado
a tu corazón
y lo has abierto
de par en par,
ventilando despacio
la ebriedad de las sensaciones.
Y te has quedado
pensativo, con la
boca abierta,
con esa mueca indistinta
con que se mira perplejo.
la infinidad de la mar.
Porque todos
somos iguales
aunque diferentes
y tú lo sabes.
Y te has perdido
en el recuerdo
de ese antiguo amor,
silbando aquel
triste bolero
que os unió.
Y te has sentido
aislado, recluido, retirado,
incomunicado, solo, separado,
indiscutiblemente apartado.
¿Cómo compartir
ese estado de naufragio?
Esa aterradora ausencia.
¿Cómo interactuar,
cuando nace esa terrible helada
de encontrados sentimientos?
Y ese frío, carente de forma,
es como el desconsuelo
de una madre.
Ese atroz frío
que te obliga entender.
Que todos
somos iguales
aunque diferentes.
En el río de la vida,
el ritmo de nuestros corazones
nos une en una caricia universal.
Porque todos
somos iguales
aunque diferentes
y tú lo sabes.
FERNANDO TORRES VICO
3 comentarios:
¿Cómo compartir
ese estado de naufragio?
Esa aterradora ausencia.
muy conmovedor tu poema Fer, me gustó leerte. gracias
Quién pudiera comprender la diferencia en la igualdad y no sentirse invadido, de sombras, de indiferencia, de preguntas...
Poema pleno de ritmo y contenido. Muy reflexivo...Me encantó...Besos...Any
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