A la sombra del pinar
cerca del río
los niños reían la siesta del verano
forjaban acertijos y los dejaban caer entre las ramas
En el sur la navidad es agua, verano, siesta y fuegos de artificio,
la navidad es un pino sin nieve
con algodones.
Diciembre tiene una ilusión
de bicicletas, helados y vacaciones
y tiene algunas sombras porque por aquí, siempre nos brota un algo tanguero en el adn.
Y
bajo el pinar
los niños desean las cosas de los niños: la risa, un paseo en bicicleta, un chapuzón,
cañitas voladoras devorando el cielo.
Este diciembre
contemplando lo que fuimos
quiero desear como niño...
un instante singular y único,
chocar las copas,
ir corriendo a las 12 a buscar al niño dios para ponerlo en su pesebre,
y un abrazo sincero que flota entre el llanto y la risa...
MARIEL MONENTE
No hay comentarios:
Publicar un comentario