Pájaro extremo, lleno de luz,
en tu sorda cárcel
cantas a la vida,
prisionero en tu libertad
con tu salvaje melodía.
También extrema en la soledad,
voy rompiendo cadenas
y perfilando las estatuas
que mudas, transitan por el camino.
Extrema en mi libertad,
vuelo sin alas
hacia el estatismo subyugante
de encontrar un cielo profundo,
para evadir nuestras prisiones.
GRACIELA MARTA ALFONSO
3 comentarios:
Me siento comprendida, Graciela. No puedo añadir nada más. Esa es la realidad de todo poeta. ¡Besos!
Hola querida poeta, tu escrito tiene riqueza expresiva y sínesis literaria, ritmo, belleza metafórica…es hermoso. Besos…Any
Any y Verónica, muchas gracias por sus comentarios!
Graciela Marta Alfonso
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